Cuando nos pisen
¿Dónde vas,
dónde vas? Hacia el mar del pasado,
hay un pez, hay un pez, pez dorado
con aleta de serie que cuenta
que aún no le has dado
tus besos de menta.
El azar
o la inercia al perder un tranvía,
bostezó como bosteza el día
cuando acaba su turno de esclavo,
buscó compañía,
buscó al fin y al cabo.
Quiéreme
con tu suerte aleatoria, destino,
quiéreme, no me pidas perdón,
asesino,
y dame tu maldad, corazón.
Qué será,
qué será, qué se fue o qué seremos
cuando nos pisen los crisantemos,
si hemos sido amantes
hasta los extremos
más alucinantes.
1 comentario
Mª Encarna -
Expresas tus sentimientos con tanta fuerza y originalidad que siempre me dejas cavilando. Espero que los crisantemos no pisen a nadie, más bien nos sumergiremos en "el mar del pasado". Besos