Blogia
Cerrolaza

Un Ángel volando

Cuando el viento resopla en los rincones

de la celda del cuerpo ya cansado,

Angelito González, angelado,

se nos marcha volando en sus canciones.

 

Fue un tahúr con el as de corazones

escondido en la manga, agazapado;

otra vez fue y tomó el camino helado,

de nuevo nos ganó a pares o nones.

 

Con sus manos sembraba campos blancos

de sus trigos de versos de agua clara;

descansaba corriendo sin violencia,

 

paseaba sentándose en los bancos;

no podemos vivir en la algazara,

porque andamos muriendo por su ausencia.

1 comentario

Mj -

Lo viste pasar?? !Qué suertudo eres Cerro! Esta tarde precisamente me llevé sus letras al sol un rato...
Siempre Angel, Angel González. Me emociona ese poeta, siempre lo hace.
Besos, al Sur